Ramírez busca convertirse en el segundo importado en ser exaltado
El venezolano Alex Ramírez debutó este martes en la boleta de votación al Salón de la Fama del béisbol japonés con el 40,4% de los votos, cifra que representa el quinto total más alto entre los 18 candidatos que aparecieron este año en la misma.
El veterano de 13 campañas en la NPB y único extranjero en superar los 2.000 hits de por vida busca convertirse en apenas el segundo jugador importado en ser exaltado, y con este sólido primer paso que acaba de dar, lo más probable es que lo logre en 2 o 3 años más.
Kazuyoshi Tatsunami, líder de por vida del circuito nipón en dobles y uno de los jugadores más populares en la historia de los Dragones de Chunichi, lideró la lista con el 77,4% de los votos, razón por la cual fue admitido al panteón de los inmortales.
Le siguieron Shingo Takatsu (60,6%), Masahiro Kawai (50,7%), Shinya Miyamoto (41.2%) y Ramírez (40,4%). Miyamoto y Ramírez, quienes fueron compañeros de equipo en las Golondrinas de Yakult, son los únicos debutantes de este selecto grupo.
Tatsunami necesitó 5 años en la boleta para poder ganarse su admisión, si bien obtuvo menos votos que Ramírez en su primera aparición. Tomando en cuenta su camino a la inmortalidad, no es descabellado pensar que Ramírez necesitará un tiempo similar para poder ser exaltado.
Junto a Tatsunami, también fueron admitidos este año el ex lanzador y ex manager de las Estrellas de DeNA Hiroshi Gondo, quien fue electo por el Comité de Expertos, y el ex presidente de la Federación de Béisbol Colegial de Japón Haruo Wakimura, quien fue seleccionado por el Comité Especial.
El norteamericano Karl “Tuffy” Rhodes, el único otro extranjero que está en la boleta, quedó en la décima posición con el 29.6% de los votos, si bien mejoró en comparación al año pasado.