Vie, 26 Abr 2024 06:47 AM

Mejía: “para mí Japón es el mejor país del mundo”

   Chiba, Japón. Especial - Después de 3 años, finalmente tuvimos la oportunidad de sentarnos a conversar con el venezolano Ernesto Mejía, quien durante una práctica reciente de su equipo en el QVC Marine Field de Chiba nos puso al tanto de la actualidad de su carrera en la NPB.

 

   El espigado inicialista de los Leones de Seibu, que tuvo un debut espectacular en 2014 al capturar el título de jonrones de la Liga del Pacífico, nos habló de lo contento que se siente jugando en Japón y de los varios recuerdos inolvidables que ha acumulado hasta ahora.

 

   Así mismo, nos explicó los problemas que ha tenido que enfrentar hasta ahora y cómo los ha superado y las muchas cosas que ha aprendido jugando en este circuito.

 

   Por último, expuso lo que gustaría hacer este año y las razones por las cuales considera que Japón es el mejor país del mundo.

 

Como no hemos tenido la oportunidad de entrevistarte antes, vamos a empezar por el principio. ¿Cómo llegaste a Japón?

   Bueno, eso ocurrió a mediadios de la temporada 2014. Yo estaba en la organización de los Bravos de Atlanta y ya teníamos como 20 juegos disputados en triple A. Entonces llegó una oferta de los Leones de Seibu para comprar mi contrato y yo era el que tenía que decidir si quería quedarme o no, porque no era obligatorio que me fuera ni nada por el estilo. Al final, yo decidí que sí quería irme y le dije a mi abogado que firmara y nos viniéramos a Japón. Yo ya había culminado mi etapa allá en los Estados Unidos y estaba contento con lo que había hecho. No llegué nunca a jugar en Grandes Ligas, pero bueno, conseguí esta oportunidad aquí en el béisbol japonés y después de 3 años en la liga de verdad que estoy muy contento. Yo espero que Dios me dé bastante salud y sobre todo condiciones para seguir jugando y retirarme aquí.

 

Tuviste un debut espectacular en la liga. Conectaste un jonrón en tu primer turno al bate y luego te quedaste con el título de jonrones de la Liga del Pacífico. ¿Te imaginaste alguna vez que podías tener tanto éxito?

   No, obviamente no. Yo sólo llegué con muchas ganas de demostrar mi talento y afortunadamente todo me salió muy bien. De verdad que fue un año maravilloso. El equipo quedó muy contento con mi rendimiento y de hecho firmé un contrato para volver a venir. Fue una experiencia bastante bonita, especialmente porque quedé líder de cuadrangulares a pesar de que cuando yo llegué ya la temporada tenía dos meses de comenzada. Fue algo muy especial, nunca lo voy a olvidar.

 

Precisamente porque llegaste luego de comenzada la temporada y no tuviste la oportunidad de participar en los entrenamientos primaverales, ¿qué te pareció todo cuando llegaste?

   Bueno, aquí todo es muy distinto, pero distinto para bien. En Japón todo camina bien. Los fanáticos son espectaculares. No importa si te va bien o te va mal, los fanáticos siempre te van a tratar igual, siempre van a estar contentos contigo. Obviamente, el pitcheo es diferente, la zona de strike es diferente, los estadios, el idioma, pero me he podido adaptar bastante bien. Me gusta mucho el ambiente aquí y cómo se maneja el juego. Todos siempre están a la expectativa de que yo dé un batazo para voltear el juego. No me lanzan nada fácil, pero yo siempre trato de hacer el ajuste. Las cosas aquí son muy diferentes, pero yo estoy muy contento. Ha sido una experiencia bien distinta, pero muy interesante.

 

¿Cómo te recibieron tus compañeros de equipo y los fanáticos cuando llegaste?

   Mis compañeros siempre me han apoyado, siempre han estado conmigo en las buenas y en las malas. Los japoneses son muy unidos. Es como en Venezuela, en las Águilas [del Zulia] nosotros somos un equipo muy unido, así que el sentimiento aquí es muy similar. Los fanáticos, como ya mencioné, son todos muy cordiales, muy respetuosos y están siempre muy contentos. Aquí los fanáticos son otra cosa.

 

Al final de la temporada 2014 ocurrió algo muy especial. Takeya Nakamura, que estaba lesionado, tomó un turno como emergente en el último juego de la campaña y pegó un jonrón para igualarte y compartir el título de jonrones contigo. ¿Qué te pareció esa hazaña?

   Eso es algo que tampoco se me va a olvidar. Nakamura es un fenómeno. Tenía 15 días no sólo sin jugar, sino también sin practicar porque estaba lesionado, ya su temporada se había terminado. Pero resulta que yo pegué un jonrón para pasarlo y en el último turno del último juego de la temporada, cuando ya no habían más oportunidades y él ni siquiera estaba en los planes del equipo, le dijeron que cogiera un bate y saliera a batear y al primer lanzamiento conectó un jonrón al jardín central. Fue algo increíble. Yo lo abracé y lo felicité cuando regresó al dugout porque fue fenomenal lo que hizo en un momento de tanta presión.

 

Pasemos ahora a la temporada 2015, en la que tuviste buenos números de jonrones y empujadas, pero tu promedio bajó mucho. ¿Qué fue lo que ocurrió?

   Sí, el año pasado tuve muchos altibajos. Fui muy inconsistente, no fui el bateador de 2014. Tenía miedo, dudaba mucho a la hora de batear y también estaba muy impaciente sobre el plato. Como dicen por ahí, uno aprende también de lo malo y yo soy una persona que toda mi vida he aprendido de lo malo, para no repetirlo. Eso me ha ayudado mucho este año, ya que estoy más paciente sobre el plato, estoy viendo mejor los lanzamientos y me estoy manteniendo más calmado a la hora de fallar. Lo que hago es simplemente concentrarme en el siguiente turno. De verdad que eso me ha ayudado, ya que este año hasta ahora me ha salido todo bien. Yo no quedé satisfecho con mis números del 2015, siento que quedé en deuda con el club y con los fanáticos, porque lo que espero que este sea el año de voltear la tortilla.

 

La temporada 2015 dejó dos grandes recuerdos para el equipo. El primero fue el récord de hits de Shogo Akiyama. ¿Cómo lo viste?

   El año que tuvo Akiyama en 2015 fue espectacular. Es una cosa increíble, yo nunca había visto algo así. En un día malo, daba dos hits. De resto, conectaba 3 y 4 hits todos los días y mantuvo ese ritmo por 6 meses. Fue algo muy impresionante y por eso fue que rompió el récord de más hits en una temporada, que antes lo tuvo Ichiro [Suzuki] y en ese momento lo tenía [Matt] Murton. Dio 216 hits en total, fue algo increíble. Yo espero que este año él pueda romper su propio récord, ¿por qué no?

 

Lo otro fue el liderato de jonrones y empujadas de Nakamura que, como es costumbre, estuvo muy por encima del resto de la liga. ¿Qué te areció esa hazaña?

   Nakamura es el dueño de esos dos departamentos: jonrones y empujadas. De verdad que es un fenómeno, él batea aquí y en donde esté. Yo he aprendido muchas cosas de él. La primera es el semblante al momento de batear, la seguridad y la calma que tiene. Luego está el saber escoger los pitcheos y también el hecho de que cuando falla no se presiona a sí mismo, sino que simplemente se concentra en el siguiente turno. Otra cosa importante es que él no falla sus pitcheos. Cuando le lanzan un pitcheo que él está esperando, él nunca lo falla y eso es clave aquí en Japón. Uno no puede fallar los pitcheos buenos porque muy pocas veces te los lanzan. Por turno, quizás te hacen sólo un lanzamiento bueno, a veces ninguno, y no puedes fallarlo, porque si lo fallas entonces tienes prácticamente cero posibilidades de batear.

 

Llegamos entonces a la temporada 2016, en la que empezaste un poco lento pero ya encendiste los motores. ¿Cómo te sientes en este momnto?

   Muy bien. Ttengo 3 juegos seguidos dando 2 hits y ayer pegué mi primer jonrón, por fin. Ya en el equipo me estaban echando broma. Me decían, “¿y tú cambiaste este año? ¿Ahora te convertiste en Akiyama, quieres dar sólo hits?”. Incluso Akiyama pegó un jonrón ayer y parecía que ahora él era el que daba los jonrones. Pero bueno, eso sale solo. Lo importante es mantenerse bateando y haciendo contacto, que lo demás viene solo, y eso es en lo que he estado trabajando todo el año. Incluso durante el descanso invernal yo prácticamente no paré, sólo me tomé 10 o 15 días de vacaciones con mi familia. De resto, no he parado de correr, de batear, de hacer pesas y eso fue lo que me ayudó este año en comparación al 2014. Después de que terminó esa temporada, me tomé mucho tiempo de vacaciones y cuando llegué aquí en el 2015 me pegaron muchas cosas que yo nunca había vivido porque yo nunca había estado aquí para los entrenamientos primaverales. Sin embargo, este año llegué con más experiencia y mejor preparado para todo.

 

¿Qué has aprendido del béisbol japonés hasta ahora? ¿Existe algo que hayas visto aquí que nunca habías visto antes en los Estados Unidos o Venezuela?

   Bueno, aquí el béisbol se juega bastante diferente a como lo jugamos nosotros. Por ejemplo, aquí invierten a los dos primeros bateadores. El que allá batea de primero aquí batea de segundo porque es el mejor tocador. Así mismo, aquí se toca la bola desde el primer inning. En lo que el primer bateador llega a la primera base, el segundo automáticamente está tocando la bola. Eso no pasa en los Estados Unidos, allá se empieza a tocar la bola a partir del sexto o el séptimo inning y eso es dependiendo del marcador. Aquí no, aquí se trabajan mucho los fundamentos. Aquí se practica la denfensa del cuadro todos los días antes del juego. Puede que alguna vez nos saltemos la práctica de bateo, pero nunca la práctica de la defensa. Otra cosa nueva es la forma en la que yo le cubro la primera base a los bateadores derechos. Aquí me paro un poco más pegado a la línea, mientras que en los Estados Unidos me paro más cargado hacia al segunda base. Hay varias cosas que aquí se hacen diferente y como ya tengo 3 años aquí ya me he adaptado a todas ellas, pero al principio me costó hacerlo. Ahora que ya estoy acostumbrado a ellas, si algún día vuelvo a jugar en los Estados Unidos voy a ver extraño otra vez hacer las cosas de forma diferente, voy a tener que ajustarme otra vez a su estilo.

 

Dejando al béisbol a un lado, ¿qué teparece Japón en general? ¿Qué tal el país, su comida y su cultura?

   Para mí Japón tiene que ser el mejor país del mundo. Esto es otra cosa. El respeto que tiene la gente, la manera en que se manejan las cosas por aquí y la disciplina que tienen son increíbles. Los japoneses son lo que son por su disciplina. La comida aquí es muy buena. Hay cosas que uno no como porque no son parte de su cultura y tienen un sabor muy distinto, pero la mayoría de la comida es muy buena y siempre está fresca, aquí nunca vas a comer algo que esté pasado o que esté viejo. En general, me encanta Japón.