Osaka, Japón. Especial – Sentado enfrente de su camerino en el Kyocera Dome de Osaka y hablando con la tranquilidad que le caracteriza, el antesalista venezolano de los Búfalos de Orix Aarom Baldiris le regaló unos minutos recientemente a Béisbol Japonés.com para ponernos al día con la actualidad de su carrera en la NPB.
Enfocarse siempre en el día a día y no estar pensando en números específicos ha sido el secreto de su éxito, quedarse jugando en Japón por muchos años es su principal deseo y luego de ver cómo se ha reforzado para este año su creencia es que su equipo llegará muy lejos, a pesar del flojo comienzo que ha tenido.
¿Cómo te sientes en la que es ya tu quinta temporada en la NPB, especialmente después del gran año que tuviste en 2011?
Me siento bien, gracias a Dios. Yo he venido trabajando fuerte todos los años para mejorar mis números, adaptarme al béisbol japonés y tratar de hacer una carrera en este país y hasta ahora me ha ido muy bien. El equipo me ha dado la oportunidad de jugar estas últimas temporadas y yo he podido responder produciendo buenos números. De eso se trata, de trabajar fuerte, de ayudar al equipo a ganar y de quedarme en Japón por mucho tiempo. A mi me gusta la vida aquí, mi familia está contenta y yo también, que es lo más importante.
La introducción de la nueva pelota el año pasado afectó al 95% de los bateadores de la liga y tu promedio ofensivo incluso bajó, pero tus jonrones y tus carreras empujadas aumentaron. ¿Cómo lo lograste?
El cambio de la pelota me afectó al principio porque yo usaba unos bates más livianos. Con la pelota anterior, yo podía conectar jonrones usando esos bates, pero con la nueva mis batazos ya no corrían tanto a pesar de que yo estaba haciendo buen contacto. Yo me puse a pensar en cómo resolver el problema, ya que no tengo la misma fuerza de un Alex Ramírez o un Alex Cabrera, y decidí empezar a usar bates más pesados para que la pelota volara más. Yo hablé con la compañía que produce los bates y ellos me mandaron unos más pesados y de inmediato empecé a ver la diferencia porque la pelota empezó a correr más. Con respecto a mi promedio, yo creo que lo que más me afectó fue mi comienzo, que fue muy flojo. Desde la mitad de la temporada hasta el final mis números fueron muy buenos, hasta el punto de que me pusieron de quinto bate. Yo me siento bastante satisfecho con mi trabajo del año pasado porque produje bastantes carreras y di bastantes batazos buenos.
Hablando de eso, tuviste una temporada tan buena que fuiste capaz de producir en cualquier puesto de la alineación. Bateaste tercero, quinto, sexto y séptimo y te fue bien en todas esas posiciones.
A mí nunca me ha importado el turno en el que me toque batear, yo simplemente trato de hacer el mejor trabajo posible en el puesto en el que me coloque el manager. Desde que llegué a Japón yo he bateado primero, tercero, quinto, sexto y séptimo y en todas esas posiciones yo sólo he tratado de hacer mi trabajo lo mejor posible y ayudar al equipo a ganar.
Tuviste un final de campaña fantástico, el equipo ganó varios partidos en septiembre gracias a un batazo tuyo. ¿Cómo te sentiste en ese momento?
De verdad que me sentí muy relajado en el plato y por eso estaba viendo todos los lanzamientos muy bien. Yo trataba de enfocarme en cada turno y cada lanzamiento, dependiendo de la situación. Yo creo que esa fue la clave de mi éxito. Cuando tenía hombres en posición anotadora, yo me fijaba en cuál lanzador estaba en el montículo y trataba de adivinar el tipo de lanzamiento me iba a hacer y eso me funcionó porque el final me llegaba el lanzamiento que estaba esperando y yo le hacía buen contacto.
Llegaron al último juego de la campaña clasificados a la postemporada, pero lo perdieron y quedaron fuera. ¿Cómo fue el ambiente en el vestuario en ese momento tan difícil?
Todo el mundo estaba muy triste porque trabajamos muy duro para llegar a la postemporada pero resulta que perdimos ese último juego y eso nos eliminó. Yo me acuerdo que yo di un jonrón en ese último juego y a pesar de que estábamos perdiendo yo les dije a los muchachos que siguieran peleando que aún quedaba tiempo, pero al final las cosas simplemente no nos salieron y terminamos perdiendo. Yo creo que también fue mala suerte, pero ahora tenemos que olvidarnos de eso y enfocarnos en esta nueva temporada que estamos comenzado y tratar de lograr nuestro objetivo, que es clasificar a la postemporada y luego quedar campeones.
¿Cómo ves al equipo este año? ¿Cuáles crees que son sus posibilidades?
Nos hemos reforzado bien. Estábamos buscando un cuarto bate y lo conseguimos en el surcoreano Dae Ho Lee. También necesitábamos a un relevista y a otro abridor e hicimos buenas contrataciones en esas áreas. Yo creo que el equipo está bueno este año, tenemos más confianza y también se siente más el entusiasmo en el vestuario. A pesar de que empezamos un poco lentos, yo creo que este año vamos a llegar lejos porque hemos jugado buenos partidos. Hasta ahora nos ha fallado un poco el bateo oportuno, pero en lo que el cuarto bate se adapte mejor y empiece a producir y nuestro primer bate empiece a embasarse más el equipo va a estar mucho mejor. Ésa va a ser la clave de nuestro éxito.
¿Tienes alguna meta en particular que te propongas para esta temporada?
Yo nunca me pongo metas específicas, nunca digo que quiero batear 40 jonrones o algo así. Yo simplemente trato de enfocarme en el día a día y yo creo que eso es lo que me ha permitido mejorar mi producción en los últimos años. Para mí, no tiene sentido pensar en el mañana o el pasado, porque lo que importa es el presente, el momento en el que uno está jugando. Yo creo que cuando uno se pone muchas metas uno se mete mucha presión y esa no es la idea. Uno está aquí para tratar de divertirse y trabajar lo mejor posible y eso es en lo que yo me enfoco.
