Quizás le sorprenda saber que los juegos interligas que darán inicio este martes 17 de mayo en el béisbol profesional japonés datan apenas de la campaña 2005, pero probablemente su sorpresa será mayor cuando se entere de que su existencia se debe no tanto al deseo de ver a los equipos de ambas ligas enfrentarse entre sí sino más bien a una huelga de jugadores que evitó en 2004 la desaparición de dos clubes y la fusión de ambos circuitos.
La idea de realizar partidos entre equipos de ambas ligas durante la temporada regular, como se ha venido haciendo en las Grandes Ligas desde 1997, tenía tiempo discutiéndose en Japón, pero sin mayores progresos debido a la fuerte oposición que presentaba a la misma el entonces dueño de los Gigantes de Yomiuri, Tsuneo Watanabe.
Tradicionalmente, el dueño de los Gigantes de Yomiuri, que es el equipo más popular y económicamente más poderoso de Japón, ha tenido siempre más influencia en la NPB que el propio comisionado, por lo que su palabra suele seguirse como si fuera ley.
Además, los dueños de los otros cinco clubes de la Liga Central también se oponían a la idea por razones más prácticas: no querían ver reducido el número de partidos que disputaban como locales ante los Gigantes, ya que al tratarse del conjunto más popular del país éstos garantizaban enormes ingresos financieros en términos de derechos televisivos, radiales y de ventas de entradas.
No obstante, la fuerte crisis económica que azotó –y aún azota– a la liga en 2004 forzó a los dueños de los equipos a reunirse para buscar una solución al problema y la idea que se les vino a la mente fue la de cerrar por completo los dos clubes que generaban más pérdidas financieras y fusionar ambos circuitos en una sola liga de 10 equipos.
Como era de esperarse, la propuesta desató fuertes protestas por parte de los medios, los fanáticos y sobre todo los jugadores, que a pesar de no tener culpa alguna de la deficiente administración de sus empresas estaban destinados a pagar todos sus errores.
A mediados de septiembre la crisis alcanzó su clímax cuando los dueños ya se preparaban a proceder a la eliminación de los dos equipos para la siguiente temporada y los jugadores respondieron realizando la primera y hasta ahora única huelga de peloteros en la historia de la NPB.
Apenas duró dos días y, en típico estilo japonés, estuvo seguida por una sentida disculpa a los fanáticos que habían comprado entradas para los juegos cancelados, a quienes ofrecieron incontables autógrafos y clínicas de béisbol gratuitas, pero cumplió su objetivo: logró bloquear la reducción del número de equipos y la fusión de ambas ligas.
Una vez superado el desacuerdo y tras acordar mantener el formato de dos ligas, los dueños de los clubes se dieron cuenta que de haber fusionado ambos circuitos todos los equipos hubiesen terminado jugando entre sí, por lo que decidieron darle el visto bueno a la idea de los juegos interligas que tenemos hoy.
También influyó mucho la disminución del poderío los Gigantes de Yomiuri, que ya no disfrutaban de la popularidad de antaño y cuyos niveles de audiencia televisiva, que en algún momento fueron superiores a cualquier otro programa del horario estelar, cayeron a menos de la mitad debido en gran parte a la creciente popularidad de las transmisiones de los partidos de Grandes Ligas en los que figuraban las grandes estrellas japonesas.
En su primera edición en la campaña 2005, los juegos interligas se disputaron en series de 6 partidos (dos como local, dos como visitante y dos en campo neutral) en los que cada equipo de una liga se enfrentaba a cada uno de los seis clubes del otro circuito.
La fórmula se repitió al año siguiente, pero a partir de 2007 las series interligas se redujeron a los cuatro partidos (dos como local y dos como visitante) que tenemos hoy.
Los juegos interligas de la temporada 2011 se realizarán entre el 17 de mayo y el 19 de junio bajo el patrocinio de la compañía de seguros Nissay, que premiará al equipo más ganador de la serie.
Hasta ahora, el éxito del evento ha sido más deportivo que comercial, ya que a pesar del gran interés que ha despertado entre los fanáticos y los medios, la venta de entradas no ha aumentado considerablemente. No obstante, el éxito ha sido suficiente como para continuar realizando los encuentros cada año.
La Liga del Pacífico ha sido la principal beneficiada, ya que no sólo ha gozado de buena asistencia de público sino que también ha visto a sus equipos dominar consistentemente a los de la Central, al punto de que en la serie del año pasado los 6 conjuntos del Pacífico terminaron en los primeros 6 puestos de la tabla de clasificación, dejando a los representantes de la Central en los 6 últimos.
¿Se repetirá la historia este año? Lo averiguaremos a partir de mañana cuando empiece la acción de los juegos interligas de la campaña 2011 con los siguientes partidos: Yakult vs Nippon Ham en el Sapporo Dome; Yomiuri vs Rakuten en el Estadio Kleenex de Sendai; Yokohama vs Seibu en el Estadio de Omiya; Hanshin vs Orix en el Kyocera Dome de Osaka; Hiroshima vs SoftBank en el Yahoo Dome de Fukuoka; y Chunichi vs Lotte en el QVC Marine Field de Chiba, en la reedición de la Serie de Japón del año pasado.
