El lanzador puertorriqueño Dicky González está dando lo mejor de sí en los entrenamientos primaverales de los Gigantes de Yomiuri con el objetivo de ponerse a tono lo antes posible y asegurarse un puesto en el primer equipo del club, según reporta el diario Sports Hochi.
El derecho boricua, que está comenzando su octava temporada en Japón, deberá pelear su puesto con otros cuatro extranjeros este año: el venezolano Levi Romero y los norteamericanos D. J. Houlton, Scott Mathieson y John Bowker.
Las reglas de la liga sólo permiten a un club tener tres lanzadores extranjeros al mismo tiempo en su roster activo, por lo que dos de los cinco importados deberán esperar por su turno en el equipo menor.
D. J. Houlton, que viene de liderar la Liga del Pacífico en 2011 con 19 triunfos, será seguramente uno de los abridores del conjunto, por lo que la pelea por los dos puestos restantes se concentrará en los otros cuatro importados.
Debido a su veteranía en la liga González lleva las de ganar, pero deberá mostrar de inmediato que está en su mejor forma para evitar lo que le sucedió la campaña pasada cuando fue bajado al equipo mejor luego de realizar dos malas aperturas en abril.
Tras dos meses de trabajo duro logró regresar al primer equipo y desde entonces mostró su mejor versión, pero la falta de apoyo ofensivo del club y una lesión sólo le permitieron registrar un modesto récord de 3-3 en 11 aperturas.
El venezolano Levi Romero, ya en su tercer año con el club, puede que tenga más problemas para asegurarse un puesto con el equipo mayor debido a que su rol no está del todo definido. En 2011 trabajó como cerrador y tuvo mucho éxito en la primera parte de la temporada cosechando 11 juegos salvados, pero después fue cambiado a relevista intermedio y sus oportunidades de lanzar se redujeron al mínimo.
Mathieson y Bowker, que apenas disputan su primera campaña en Japón, deberán trabajar más duro que nadie para ganarse su puesto, pero por el simple hecho de ser novatos puede que reciban la oportunidad de lanzar más rápido que el resto, precisamente para ver cómo rinden con el primer equipo.
Cualquiera que sea el caso, lo más seguro es que los que no arrojen buenos resultados de inmediato serán los primeros en ser relegados al equipo menor.
