El Sistema de Traspasos utilizado por la NPB para exportar a aquellos jugadores japoneses que aún no se han ganado el derecho de ser agentes libres a las Grandes Ligas suma ya dos intentos fallidos este invierno y hasta corre el peligro de irse en blanco esta temporada.
Primero fue el lanzador de las Estrellas de Yokohama Hiroki Sanada, quien fue puesto a la venta a través del sistema a principios de diciembre pero no recibió ni una sola oferta de los equipos de las mayores, y ahora le tocó el turno al campo corto Hiroyuki Nakajima, quien no pudo llegar a un acuerdo contractual con los Yanquis de Nueva York.
El conjunto del Bronx ganó los derechos exclusivos de negociación con el jugador a principios de diciembre tras presentar la oferta más alta (aproximadamente 2,5 millones de dólares), pero al final sólo le ofreció un tercio de su salario actual y un puesto como suplente, ya que su infield está todo ocupado por súper estrellas.
Otros dos casos quedan pendientes por resolverse y ambos podrían terminar con el mismo resultado.
El jardinero Norichika Aoki tiene hasta el 17 de enero para llegar a un acuerdo con los Cerveceros de Milwaukee, que ganaron los derechos exclusivos para negociar con él, pero al igual que con Nakajima sólo le están ofreciendo un puesto como suplente y un tercio de su salario actual y lo más probable es que el jugador termine rechazando la oferta.
Por último, está el caso de Yu Darvish, el lanzador estrella por el que los Vigilantes de Texas pagaron $51,7 millones de dólares para obtener el derecho a negociar con él. Debido al interés de ambas partes en llegar a un acuerdo este es el caso que tiene más probabilidades de terminar positivamente, pero las aspiraciones salariales del joven talento, sumadas a la ya exorbitante suma pagada para conversar con él, podrían dificultar las negociaciones.
De cualquier forma, con un probable récord de 3-1 o incluso 4-0 durante el presente receso invernal, es evidente que la validez y utilidad del Sistema de Traspasos está siendo cuestionada por las Grandes Ligas y considerando que tampoco se trata de un sistema muy popular en Japón, es probable que pronto veamos cambios en él o incluso su completa desaparición.
El sistema nació en 1998 como una manera de garantizar un acceso equitativo de todos los equipos de las Grandes Ligas a los jugadores japoneses que no son todavía agentes libres y también de recompensar adecuadamente a los clubes de la NPB que estaban perdiendo a sus principales estrellas sin recibir nada a cambio.
A pesar de sus evidentes fallas, entre las que destaca la violación total de los derechos de los jugadores, el sistema funcionó hasta ahora, pero los pobres resultados arrojados recientemente por algunos jugadores por los que se pagaron fortunas han llevado a los equipos de las Grandes Ligas a pensarlo dos veces antes de presentar nuevas ofertas.
Adicionalmente, los jugadores japoneses también se están dando cuenta de que su única vía para irse a las Grandes Ligas antes de convertirse en agentes libres ya no está funcionando, por lo que pronto comenzarán a presionar por cambios.
Si a esto agregamos el hecho de que aquellos jugadores que han firmado con clubes de las mayores como agentes libres lo han hecho en condiciones muy beneficiosas para ambas partes, no sería ninguna sorpresa ver al Sistema de Traspasos desaparecer a corto plazo o al menos sufrir modificaciones radicales.
