Una excelente apertura del derecho Mario Santiago sumada a un jonrón clave de Alex Ríos en la séptima entrada le dieron un triunfo de 3-1 a Puerto Rico sobre Japón en el Parque AT&T de San Francisco y el pase a la final del Clásico Mundial de Béisbol 2013.
Japón, que intentaba capturar el título por tercera vez consecutiva, se despidió del torneo de forma decepcionante al cometer errores cruciales y lucir impotente ante unos lanzadores boricuas que estuvieron muy bien dirigidos por el receptor Yadier Molina.
El abridor japonés Kenta Maeda, a pesar de no mostrar su mejor forma, logró limitar a la potente alineación rival a sólo una carrera en 5 entradas completas, pero el relevo del equipo, como ya lo había hecho varias veces en los juegos anteriores, volvió a mostrarse inefectivo y terminió concediendo las carreras que pusieron el juego fuera de su alcance.
Puerto Rico, por su parte, planificó el encuentro a la perfección y supo explotar las debilidades de Japón cuando tuvo la oportunidad de hacerlo. En la primera entrada, logró anotar la primera carrera del partido con un sencillo oportuno, y en la séptima, cuando el relevo nipón empezó a aflojar, dio el golpe de gracia con el jonrón de 2 carreras de Ríos.
Japón había llegado al partido como el amplio favorito para avanzar a la final, pero el descanso de 5 días desde su partido anterior y el hecho de jugar por primera vez fuera de casa probaron ser una distracción muy difícil de ignorar.
Puerto Rico disputará la gran final del torneo el martes ante el ganador del juego de mañana entre la República Dominicana y Holanda. Se convierte así en apenas el segundo conjunto latinoamericano en llegar a esa instancia luego de que Cuba lo hiciera en 2006.
