Los Búfalos de Orix anunciaron oficialmente este lunes que han dejado en libertad al lanzador dominicano Alfredo Fígaro, quien defendió los colores del club durante las dos últimas temporadas pero que ahora desea irse a las Grandes Ligas.
El caribeño, creyéndose libre de obligaciones en Japón, firmó un contrato de ligas menores con los Cerveceros de Milwaukee en diciembre, pero Orix protestó la transacción alegando que todavía tenía los derechos exclusivos sobre el jugador.
Milwaukee emitió una disculpa inmediata a la franquicia japonesa y dejó claro que no se interpondría en los planes de ésta para renovar al lanzador. No obstante, nunca dijo que anularía el contrato que el caribeño había firmado con ellos.
Orix, a pesar de no tener un contrato firmado con el dominicano para la campaña 2013, alegó que lo tenía en su lista de “jugadores reservados” y que, de acuerdo a su contrato original, éste no podía firmar con ningún otro equipo salvo que el club le otorgase su libertad.
Fígaro, desilusionado por el tratamiento recibido por el equipo en la campaña 2012, en la que no pudo sumar ni una sola victoria y pasó una gran parte del tiempo en el conjunto menor, rechazó la oferta de renovación para 2013, pero aun así el equipo esperaba de alguna manera convencerlo de que regresase con ellos.
El dominicano mantuvo firme su postura y al final el equipo, dándose cuenta de que éste no regresaría a Japón, decidió otorgarle la libertad. En los días previos al anuncio había amenazado con otorgarle esa libertad pero sólo bajo la condición de que éste no firmase con ningún otro club en Asia, pero ningún detalle al respecto fue mencionado en el anuncio de este lunes.
Lo más probable es que Fígaro termine haciendo válido el contrato de ligas menores que firmó con Milwaukee en diciembre y luche por ganarse un puesto en el roster del club para 2013.
Un reporte de la agencia de noticias Kyodo explica que esta no es la primera vez que Orix se ve envuelto en confusas disputas contractuales.
En 2005, intentó obligar al lanzador Hisashi Iwakuma a firmar con ellos en contra de su voluntad, luego de prometerle que no lo haría. En 2007, tuvo una desagradable disputa laboral con el toletero Norihiro Nakamura, a quien tuvo que dejar en libertad, y en 2008, protestó la firma del lanzador norteamericano Jeremy Powell con los Halcones de SoftBank alegando que ellos lo habían firmado primero cuando en realidad eso no era cierto.
