Mar, 23 Abr 2024 03:16 AM

Ya son 24 los latinos que han ganado el JMV del mes

 

   Los galardones al Jugador Más Valioso del mes que ganaron el cubano Dayán Viciedo y el venezolano Ernesto Mejía el martes pasado nos hacen recordar el exitoso historial que tienen los jugadores latinos en ese departamento en la NPB.

 

   Nada menos que 24 de ellos se han quedado con los honores en al menos una ocasión desde que el premio comenzó a otorgarse en 1975, incluyendo al venezolano Alex Ramírez, que lidera el grupo por una buena ventaja luego de haber capturado el trofeo en 9 ocasiones.

 

   Ramírez es, de hecho, uno de los jugadores que más veces lo ha obtenido en la historia de la NPB. Sólo lo superan Masahiro Tanaka, que posee el récord de la liga con 12 galardones, e Ichiro Suzuki, quien recibió el premio en 10 oportunidades.

 

   El toletero criollo es, incluso, el único jugador en todo el circuito nipón que ha logrado obtenerlo con tres equipos distintos, luego de haberlo recibido 5 veces con las Golondrinas de Yakult, 3 veces con los Gigantes de Yomiuri y una vez con las Estrellas de DeNA, que es el conjunto en el que ahora trabaja como manager.

 

   Hasta hace no mucho, el carqueño poseía también el récord de más galardones obtenidos de manera consecutiva con 3, luego de haberse quedado con los honores en julio, agosto y septiembre de 2007, año en el que se convirtió en el primer extranjero en superar la barrera de los 200 hits en una temporada.

 

   Sin embargo, esa marca fue superada en 2013 por Tanaka, quien obtuvo el premio en cinco meses consecutivos (de mayo a septiembre) en su camino a completar la campaña más dominante jamás registrada por un lanzador en la NPB: 24-0, con un salvado, 183 ponches y una efectividad de 1.27 en 28 juegos.

 

   Como ya mencionamos, el galardón al Jugador Más Valioso del mes de la liga japonesa apenas data de 1975, año en el que empezó a otorgarse, pero sólo en la Liga Central y sólo a un pelotero, independientemente de si fuese lanzador o jugador de posición.

 

   La Liga del Pacífico adoptó la iniciativa en 1979 y se mantuvo utlizando el mismo formato de la Liga Central hasta 1989, momento en el que ambos circuitos acordaron instaurar la modalidad actual en la que cada mes el premio es presentado tanto a un lanzador como a un jugador de posición en cada liga.

 

   El primer latino en recibirlo fue el puertorriqueño Tommy Cruz, quien en su debut en el béisbol japonés con los Luchadores de Nippon Ham fue electo como el Jugador Más Valioso de la Liga del Pacífico en septiembre de 1980. Luego repetiría la hazaña en septiembre de 1984 para culminar su carrera de 6 años en la NPB con 2 trofeos en su haber.

 

   El siguiente caribeño en obtenerlo fue el panameño Ben Ogilvie, quien lo recibió en septiembre de 1988 en la Liga del Pacífico mientras defendía los colores de los Búfalos de Kintetsu (hoy Búfalos de Orix).

 

   Le siguieron en 1989 el puertorriqueño Tony Bernazard y el cubano Orestes Destrade, quienes lo capturaron de manera consecutiva en agosto y septiembre, respectivamente, en la Liga del Pacífico. El primero lo hizo con los Halcones de Daiei (hoy Halcones de SoftBank) y el segundo con los Leones de Seibu.

 

   A partir de 1996, año en que los dominicanos Bernardo Brito (Nippon Ham), José Núñez (Daiei) y Balvino Gálvez (Gigantes de Yomiuri) se alzaron con el premio en mayo, junio y julio, respectivamente, al menos un representante latino ha recibido la distinción cada temporada hasta ahora, con las únicas excepciones de las campañas de 1998 y 2015.

 

   Luego de Ramírez, el segundo pelotero hispano que más galardones al Jugador Más Valioso del mes ha recibido es el también venezolano Alex Cabrera, quien durante su extensa carrera de 12 años en Japón capturó el premio en 6 ocasiones en la Liga del Pacífico.

 

   Las primeras cuatro ocurrieron en abril de 2001, agosto de 2002, junio de 2003 y mayo de 2006, mientras defendía los colores de los Leones de Seibu, mientras que las dos restantes fueron en agosto de 2008 y julio de 2009, durante su paso por los Búfalos de Orix.

 

   El tercer lugar de la lista lo comparten, conjuntamente, el venezolano Roberto Petagine, el panameño Fernando Seguignol y el dominicano Tony Blanco.

 

   Petagine lo obtuvo por primera vez en julio de 1999 en la Liga Central, en el que fue su debut en el béisbol japonés con las Golondrinas de Yakult. Los otros dos galardones llegaron de manera consecutiva en abril y mayo de 2001, año en el que no sólo se convirtió en el primer latino en ganar el premio al Jugador Más Valioso de la temporada regular sino en el que también llevó a Yakult a ganar la Serie de Japón.

 

   Seguignol se quedó con los honores por primera vez en abril de 2004, campaña que terminó como co-líder de jonrones de la Liga del Pacífico con 44 mientras defendía la camiseta de los Luchadores de Nippon Ham. Luego, repitió la hazaña en septiembre de 2006, también con Nippon Ham, y septiembre de 2008, esta vez con las Águilas de Rakuten.

 

   Blanco, por su parte, lo ganó por primera vez en octubre de 2011, mientras guiaba a los Dragones de Chunichi a su segundo título consecutivo de la Liga Central. Luego, lo obtuvo una vez más con Chunichi en mayo de 2012 y, por tercera ocasión, en abril de 2013 en su debut con las Estrellas de DeNA.

 

   Además de Tommy Cruz, el también puertorriqueño Leo Gómez es el único otro latino que ha recibido la distinción en dos ocasiones. La primera de ellas fue en septiembre de 1999, cuando disputaba su tercera campaña con los Dragones de Chunichi, y la segunda ocurrió en mayo de 2000, también con el conjunto de Nagoya.

 

   Los otros jugadores latinos que no han sido mencionados todavía y que obtuvieron el galardón una vez durante sus carreras en la NPB son los dominicanos Domingo Martínez (5/1997), José Mayobanex Fernández (8/2007), Héctor Luna (5/2013), Wily Mo Peña (4/2014) y Rainel Rosario (9/2014), los panameños Sherman Obando (4/2000) y Julio Zuleta (6/2005), el mexicano Karim García (8/2005), el puertorriqueño Dicky González (5/2009), el cubano Dayán Viciedo (4/2016) y el venezolano Ernesto Mejía (4/2016).

 

   Si los agrupamos por nacionalidades, República Dominicana es el país que cuenta con más ganadores del premio con 9 en total. Le siguen Venezuela, Panamá y Puerto Rico con 4 cada uno, Cuba con 2 y méxico con uno.

 

   No obstante, si nos guiamos por el número total de premios obtenidos, Venezuela domina la lista con 19 trofeos, seguida de República dominicana (11), Puerto Rico (6), Panamá (6), Cuba (2) y México (1).

 

   Las campañas más fructíferas hasta ahora han sido las de 1996, 2008 y 2009, ya que en cada una de ellas 3 latinos distintos obtuvieron el reconocimiento en alguno de los dos circuitos. En 2007, el número total de galardones ascendió a 4, pero 3 de ellos fueron a parar a las manos de un mismo jugador: el venezolano Alex Ramírez.

 

   La temporada 2016 acaba de comenzar y ya 2 peloteros latinos se han alzado con el galardón, por lo que este año podría igualarse el récord actual de 3 premios en un mismo año obtenidos por 3 hispanos distintos, o incluso quebrarse.

 

   De cualquier forma, lo importante es que los latinos, de manera casi ininterrumpida desde 1996, continúan siendo protagonistas en la NPB y eso es algo que debe ser celebrado.

 

   Tal como en su momento invadieron las Grandes Ligas y asumieron buena parte del protagonismo de ese circuito con su excelente juego y sus inmejorables resultados, los peloteros caribeños también han llegado en masa a Japón, donde no sólo se han convertido en favoritos de la fanaticada sino también han acumulado, como ya lo hemos señalado en este artículo, innumerables premios.

 

   Nuestras felicitaciones de nuevo a Viciedo y Mejía por sus merecidos reconocimientos y por regalarnos un inicio de temporada tan fascinante y prometedor. Esperemos que sigan los éxitos y que este se convierta en un año récord para los jugadores latinos en la NPB.