Jue, 25 Abr 2024 15:34 PM

El dilema de DeNA con su exceso de extranjeros

 

   Las Estrellas de DeNA se han convertido este año en el equipo de la NPB con más jugadores latinos en sus filas luego de firmar contratos con seis de ellos, que además son todos de gran calidad y prometen realizar grandes contribuciones a su causa.

 

   No obstante, la liga sólo les permite a sus clubes tener a un máximo de 4 importados en su roster activo de manera simultánea, por lo que obligatoriamente dos de esos seis peloteros deberán ser relegados al conjunto menor una vez que empiece la campaña.

 

   Esto crea un par interrogantes muy importantes. ¿Quiénes serán los escogidos para empezar la temporada en el primer equipo y quiénes serán bajados al segundo?

 

   Antes de entrar en más detalles, mencionemos primero a los seis jugadores en cuestión. Estos son los venezolanos José Celestino López (1B), Aarom Baldiris (3B) y Guillermo Moscoso (lanzador abridor) y los cubanos Yulieski Gourriel (2B-3B), Lourdes Gourriel hijo (SS) y Yoslán Herrera (relevista).

 

   Los primeros cuatro ya defendieron los colores del equipo el año pasado, mientras que los dos últimos estarán debutando en Japón esta campaña.

 

   A pesar de que el club cuenta con un par de infielders japoneses de calidad, en teoría podría darse el lujo de tener a cuatro latinos defendiendo el cuadro: López en primera, Gourriel en segunda, Lourdes hijo en el campo corto y Baldiris en tercera.

 

   Pero lamentablemente esto  no es posible, ya que el reglamento de la NPB estipula que de los cuatro importados que estén en el roster activo en un momento determinado al menos uno deberá ser lanzador y otro jugador de posición.

 

   Es decir, el equipo puede tener a 3 jugadores de posición y a un lanzador en su roster activo, o dos y dos, o uno y tres, pero nunca cuatro jugadores de posición o cuatro lanzadores.

 

   Como consecuencia, resulta imposible tener a López, Baldiris y los hermanos Gourriel jugando todos al mismo tiempo, por lo que sin duda el conjunto no podrá utilizar todas sus mejores armas sobre el terreno este año.

 

   Debido a su gran calidad lo más probable es que elija alinear a 3 de ellos, pero entonces esto va a crear un problema adicional con su cuerpo de lanzadores porque Moscoso y Herrera tampoco podrán ver acción al mismo tiempo debido a la falta de cupos disponibles.

 

   Gracias a su gran rendimiento en los entrenamientos primaverales el club manifestó en algún momento que consideraba a Herrera como su candidato principal para ocupar el rol de cerrador, pero obviamente ese plan ya no resulta viable porque de concretarse forzaría la salida de Moscoso o alguno de los tres infielders del roster.

 

   Esta es la razón por la que hablamos de dilema. Los seis latinos con los que cuenta el equipo son todos buenos y además, con la excepción de los hermanos Gourriel que todavía no han llegado a Japón, han rendido muy bien durante la primavera, por lo que sería ideal ponerlos a jugar a todos al mismo tiempo, pero como ya hemos explicado eso no es posible.

 

   Lo más sensato sería promover al roster activo para el inicio de la temporada a los cuatro que ya tienen experiencia en la liga (López, Baldiris, Moscoso y Gourriel) y relegar al conjunto menor a los dos debutantes (Lourdes hijo y Herrera).

 

   Esta resulta la opción más lógica en este momento ya que tanto López como Baldiris batearon muy bien durante la pretemporada (.390 y .375, respectivamente), mientras que Moscoso también tuvo sus momentos estelares y además el conjunto lo considera como uno de los miembros fijos de su rotación de abridores.

 

   Los hermanos Gourriel constituyen una incógnita porque todavía no han llegado a Japón, pero considerando que Yulieski estará ganando 3 millones de dólares esta temporada lo más probable es que él sea el elegido para comenzar la campaña como titular.

 

   Lourdes hijo y Herrera deberán entonces esperar por una lesión o algún bajón en el rendimiento de alguno de esos cuatro jugadores para poder debutar en la liga y demostrar lo que pueden hacer sobre el terreno.

 

   Las cosas se facilitarán mucho en julio, cuando los hermanos Gourriel deberán ausentarse para participar en los Juegos Panamericanos de Toronto y las opciones se reduzcan a los otros cuatro latinos disponibles, pero salvo eso el manager Kiyoshi Nakahata tendrá que lidiar con el dilema constante de decidir a quién poner a jugar y a quién no.

 

   Cabe destacar que este problema no sólo afecta a DeNA, sino también a otros equipos de la NPB que cuentan con demasiados extranjeros en sus filas.

 

   Los Dragones de Chunichi, por ejemplo, poseen a cinco latinos en sus filas, los dominicanos Héctor Luna, Anderson Hernández, Ricardo Nanita y Amaury Rivas y el cubano Raúl Valdés, y tampoco pueden ponerlos a jugar a todos al mismo tiempo.

 

   Sin embargo, en su caso no existe ningún dilema porque Rivas tuvo una pretemporada desastrosa y fue bajado al equipo menor para trabajar en su mecánica, por lo que los otros cuatro están libres para comenzar la temporada en el roster activo, si así lo decide su manager.

 

   Los Carpas de Hiroshima también cuentan con seis foráneos en su nómina y esto, en principio, iba a crear un conflicto posicional entre el dominicano Rainel Rosario y el venezolano Jesús Guzmán, ya que ambos cubren el jardín izquierdo.

 

   No obstante, la lesión del inicialista norteamericano Brad Eldred le abrió las puertas de esa posición a Guzmán, por lo que ahora ambos podrán iniciar el año en el roster activo, si bien Rosario todavía se está recuperando de la extracción de su apéndice.

 

   Los casos que prometen afectar de una manera más drástica las posibilidades de ver acción de un jugador latino son los de los Tigres de Hanshin y los Halcones de SoftBank.

 

   Hanshin acaba de firmar al lanzador puertorriqueño Mario Santiago, pero ya tiene a otros cuatro extranjeros en sus filas que son prácticamente inamovibles: Randy Messenger (líder de la Liga Central en victorias y ponches en 2014), Mauro Gómez (líder de empujadas de la NPB en 2014), Matt Murton (líder bate de la NPB en 2014) y Seung-Hwan Oh (líder de salvados de la Liga Central en 2014).

 

   Como consecuencia, las posibilidades de jugar de Santiago son mínimas, salvo que alguno de ellos se lesione y eso casi nunca ocurre.

 

   Algo similar ocurre con el cubano Bárbaro Cañizares, quien en 2014 ya sufrió las consecuencias negativas de la escasez de cupos para extranjeros en el roster activo de SoftBank.

 

   El actual campeón de la Serie de Japón posee nada menos que 8 peloteros extranjeros en su nómina, por lo que las posibilidades del habanero de ver acción en el primer equipo son incluso menores que las de Santiago.

 

   En su caso, sin embargo, no se trata tanto del exceso de extranjeros con el que cuenta el club, ya que después del surcoreano Dae Ho Lee él es el segundo mejor jugador de posición foráneo en el roster, sino del extraordinario talento ofensivo que tienen los titulares japoneses del club.

 

   En 2014, nada menos que 5 de ellos se ubicaron entre los 10 mejores bateadores de la Liga del Pacífico, lo que convirtió al bate del cubano en un mero adorno.

 

   Para colmo, cuatro de esos jugadores son jardineros, por lo que el manager debe utilizar a uno de ellos como bateador designado para poder incluirlo en su alineación y eso cierra las puertas al hispano, que normalmente cumple ese rol.

 

   Su otra opción para jugar sería cubrir la primera base, pero ese puesto ya está ocupado por el surcoreano Lee, que es el otro miembro de ese grupo de 5 bateadores y además el pelotero mejor pagado del equipo.

 

   Como esta situación no promete cambiar en lo más mínimo en 2015, Cañizares se enfrenta a la posibilidad de pasar un segundo año casi completo en el conjunto filial, salvo que una lesión le permita ver algo de acción.

 

   La temporada 2015 de la NPB dará inicio este viernes 27 de marzo, momento a partir del cual conoceremos las respuestas a las distintas interrogantes que nos planteamos hoy.