Mar, 23 Abr 2024 22:40 PM

La pelota oficial de la NPB podría salvar a la MLB

 

Sawamura afirma que una mejor pelota es la solución al problema actual de la MLB

 

   El relevista japonés de los Medias Rojas de Boston Hirokazu Sawamura declaró recientemente que, en su opinión, la mejor solución que se le puede dar al problema de los lanzadores que están siendo chequeados por los umpires en las Grandes Ligas es utilizar una mejor pelota.

 

   Como ejemplo, citó la pelota oficial de la NPB, fabricada por la compañía Mizuno, que viene ya con una leve capa de una sustancia pegajosa que la hace más fácil de agarrar por parte de los lanzadores. De esa manera, se hace innecesario agregarle algo más.

 

   Joshua Diemert, del portal Pinstripealley.com, apoya la idea del lanzador japonés y propone que la MLB adopte un sistema similar al del circuito nipón, en el que las pelotas ya vienen con un sustancia que mejora su agarre y se penaliza a todo aquel que utilice una sustancia adicional.

 

   El problema del chequeo masivo de los lanzadores de las mayores para comprobar que no están utilizando sustancias prohibidas para controlar mejor la pelota no sólo está afectando mucho las relaciones entre los jugadores y la liga, sino que además está dañando la imagen de la organización.

 

   Así como los bateadores utilizan un spray para que el bate no se les resbale de las manos a la hora de batear, los lanzadores también tienen el derecho de utilizar una sustancia similar que les permita agarrar mejor una pelota que es notablemente resbaladiza, como lo acotó Sawamura en sus declaraciones.

 

   El problema es que, por supuesto, al no existir una sustancia estándar para resolver el problema muchos lanzadores buscan su propia solución y algunos terminan consiguiendo mejores sustancias que los otros, lo que les otorga una ventaja injusta sobre el resto.

 

   Es por eso que la idea de fabricar una pelota nueva que venga ya con una sustancia que permita agarrarla mejor suena como una solución ideal para resolver el difícil problema que la MLB está enfrentando en este momento. Es más, hasta podrían importarse de Japón mientras se fabrican las nuevas pelotas locales.

 

La pelota oficial de la MLB ha estado causando problemas desde 2016

 

   Esto nos trae a otro punto muy importante. Esta no es la primera vez que la pelota oficial de las Grandes Ligas, fabricada por Rawlings, ha causado serios problemas a la MLB. ¿Cómo es posible que los defectos de producción persistan después de tantos años y todavía no se hayan corregido?

 

   A partir de la temporada 2016, el número de jonrones en la Gran Carpa aumentó de una manera tan desmesurada que la liga se vio obligada a realizar una investigación para comprobar el hecho y tratar de encontrar su causa. 

 

   El comisionado Rob Manfred creó incluso una comisión especial, conformada por un grupo de científicos de distintas especialidades, para estudiar el caso a fondo y el resultado de su estudio fue que, efectivamente, el número de cuadrangulares había aumentado, pero no lograron encontrar la razón.

 

   Fue finalmente una astrofísica llamada Meredith Willis, que es aficionada a la costura y al béisbol, lo que dio con el origen del problema en su tiempo libre. Comparando las pelotas fabricadas antes y después de 2016, se dio cuenta que las últimas tenían una trenza más gruesa que las anteriores.

 

   Ese pequeño cambio resultó en pelotas más compactas, que rebotaban mejor y eran más aerodinámicas, por lo que cuando hacían contacto con el bate recorrían una distancia más larga y, por lo tanto, caían más a menudo en las gradas.

 

   La noticia fue recibida con un aire de entendimiento, pero no de indignación con respecto a un cambio que no fue aprobado por la MLB y que afectó seriamente el rendimiento de los lanzadores y, como consecuencia, sus bonos.

 

   Hasta donde sabemos, ese problema no ha sido corregido hasta el momento, como tampoco lo ha sido el del aspecto resbaladizo de la pelota, que como ya lo hemos mencionado ha dado paso a esta cacería de brujas que estamos viviendo actualmente.

 

Después de un debut accidentado, la pelota oficial de la NPB se estabilizó en 2013 y no ha causado problemas desde entonces

 

   La NPB vivió un período turbulento entre 2011 y 2013 debido a la adopción de la primera pelota oficial del circuito, fabricada por Mizuno. La idea fue descontinuar la práctica de que cada equipo utilizase un proveedor de pelotas distinto, lo que obligaba a los lanzadores a adaptarse a una pelota nueva cada vez que les tocaba trabajar como visitantes.

 

   Tuvo éxito en el sentido de que a partir de ese momento todos los monticulistas tenían que utilizar la misma pelota, pero no en el de mantener el nivel ofensivo del circuito, que cayó drásticamente debido a lo poco que rebotaba el nuevo producto.

 

   Después de un par de temporadas de muy poca producción ofensiva, uno de los oficiales de la NPB, a espaldas del comisionado, ordenó cambiar las características de las pelotas de Mizuno para que cumplieran con los parámetros de calidad que han debido cumplir desde el principio.

 

   Eso, como se imaginarán, causó un escándalo tremendo. Primero, porque el cambio fue hecho en secreto, y segundo, porque fue hecho a espaldas del comisionado, lo que dejó en evidencia la poca autoridad que éste tenía sobre su trabajo y la liga.

 

   El cuento es que a raíz de ese problema y para evitar que el mismo continuase causando estragos en el futuro, la NPB comenzó a realizar pruebas periódicas de todas las pelotas que se utilizaban en sus juegos para comprobar que cumplían con los parámetros de calidad requeridos.

 

   Desde entonces, el problema no se ha vuelto a presentar y tanto los lanzadores como los bateadores del circuito continúan trabajando sin que los defectos de fabricación de la pelota afecten para nada sus desempeños individuales o los bonos que reciben por su rendimiento.

 

   Es decir, a la NPB le tomó sólo 2 años identificar, corregir y solucionar permanentemente un problema que afectó mucho a sus peloteros y generó innumerables críticas por parte de los numerosos medios deportivos que existen en Japón.

 

¿Cómo es posible que la pelota oficial de la MLB siga causando problemas?

 

   ¿Cómo es posible entonces que la mejor liga del mundo todavía esté inundada de problemas 6 temporadas después de sufrir su primer gran problema a causa de un defecto de fabricación de su pelota oficial y que todavía no haya demandado a Rawlings por daños y perjuicios o simplemente cambiado de proveedor?

 

   Según Kevin Cash, el manager de los Rayos de Tampa Bays, la MLB ha estado trabajando duro con Rawlings para tratar de corregir todos los problemas y fabricar una pelota ideal para todos, “pero todavía no lo ha logrado”, acota.

 

   El artículo de Joshua Diemert, del portal Pinstripealley.com, que mencionamos al principio asegura que el proceso para crear la pelota ideal para la MLB “podría tomar años” y que tanto los lanzadores como los bateadores tienen que aprobar la nueva pelota antes de que se haga oficial.

 

   Sin embargo, como ya lo indicamos anteriormente, a la NPB le tomó sólo 2 años resolver el problema que tuvo con su pelota y ya suma 8 campañas consecutivas evitando con éxito caer de nuevo en una trampa similar, por lo que esa afirmación de que el proceso “podría tomar años” no parece tener sentido.

 

   Resulta curioso ver cómo el público general se sigue refiriendo a la NPB como la segunda mejor liga del mundo cuando cada vez se hace más evidente que en muchos aspectos el circuito nipón supera con claridad a su par norteamericano.

 

   Lo hizo en 2018 y 2019 en asistencia promedio, por ejemplo, y lo está haciendo ahora con su pelota oficial, que después de ser tan criticada al momento de su adopción parece haberse convertido en la mejor pelota de béisbol del mundo.

 

La MLB debería adoptar los empates, tal como lo hace la NPB

 

   Otras ideas que la MLB debería copiar inmediatamente del circuito nipón para resolver otros de sus problemas actuales son la adopción de los empates y la utilización de micrófonos por parte de los umpires.

 

   Lo primero evitaría que los partidos de la temporada regular se extiendan demasiado y eliminaría la utilización de los llamados “corredores fantasmas” que aparecen en las bases al comienzo de cada entrada adicional. Lo segundo permitiría a los umpires explicar al público presente cualquier decisión que parezca controversial y calmar así el ánimo de los fanáticos.

 

   A pesar de sus muchos e indudables defectos, la NPB es sin duda un ejemplo a seguir en términos de béisbol organizado.