Vie, 19 Abr 2024 09:57 AM

Los cambios del Seibu Dome a través de los años

 

Las áreas abriertas detrás de los jardines han sido reemplazadas por asientos

 

   Esta semana, el MetLife Dome, sede de los Leones de Seibu, completó un proceso de remodelación en sus gradas que eliminó los espacios abiertos que estaban detrás de los jardines y los reemplazó con dos secciones nuevas de asientos.

 

   Se trata de un cambio menor a un estadio que ya ha sido remodelado en varias ocasiones, pero el mismo cierra las puertas a una de las tradiciones más arraigadas del béisbol japonés: ver los partidos sentados en el piso mientras se hace un picnic, o parados, cantando y bailando junto al resto de los fanáticos.

 

   Esta despedida nos hace recordar con nostalgia el que es uno de los parques más emblemáticos de la NPB, que ha maravillado y cautivado a sus visitantes desde que fue inaugurado en la temporada 1979.

 

   Yoshiaki Tsutsumi, el hombre más rico del mundo a finales de los años 70, ordenó su construcción con la idea original de albergar algunos partidos oficiales del circuito nipón cada año, pero cuando se dio cuenta de su propuesta no estaba siendo bien recibida decidió comprar un equipo y mudarlo a su estadio.

 

Originalmente, el Seibu Dome era un estadio abierto

 

   Lo construyó al noroeste de Tokio, es una hermosa área rodeada de lagos y árboles a la que también agregó un parque de diversiones, canchas de tenis y varias atracciones más. Inspirado en el Estadio de los Reales de Kansas City, se convirtió en su momento en la instalación deportiva más moderna de Asia.

 

   Haciendo gala de una impecable visión comercial, Tsutsumi construyó también una estación de trenes Seibu justo enfrente del estadio que todavía hoy es la manera más rápida y efectiva de llegar al mismo.

 

   Así, Tsutsumi, como jefe del Grupo Seibu, que incluye hoteles, compañías inmobiliarias, tiendas por departamento y una línea de autobuses y trenes de pasajeros, se aseguró de que todas las ganancias que produjera su nuevo equipo se quedarían en su compañía y así ha sido desde entonces.

 

   El equipo que decidió adquirir fueron los Leones de Crown Lighter, para entonces el peor club de toda la NPB, cuya sede era el Estadio Heiwadai de Fukuoka. Una vez completada la transacción, lo mudó a su nuevo estadio y le cambió el nombre a Leones de Seibu.

 

   El nuevo parque fue nombrado Estadio de los Leones de Seibu y originalmente no tenía techo, sino que era abierto como otros parques de la NPB. Con su impecable diseño y su espectacular vista de la naturaleza que lo rodea, se convirtió inmediatamente en un popular destino para los fanáticos.

 

   Desde el principio, fue concebido para que las dos secciones directamente detrás de los jardines izquierdo y derecho, respectivamente, fueran espacios abiertos con grama artificial para que los fanáticos pudieran ver el juego sentados, o también parados, dependiendo del nivel de asistencia.

 

   Gracias a la insistencia de Tsutsumi de no sólo generar dinero sino también buenos resultados deportivos, en apenas 4 temporadas el club ganó su primera Serie de Japón bajo su nuevo nombre y luego sumaría 7 más en los siguientes 10 años.

 

El techo fue agregado en 2 etapas. La primera se completó en el invierno 1997-1998

 

   A finales de 1997, el club decidió añadirle un techo al estadio, de manera de reducir el número de juegos que se suspendían cada año por lluvia. La construcción comenzó durante el invierno y se completó luego de terminada la campaña 1998.

 

   A pesar de que el parque estrenó su nuevo techo en 1999, su nombre ya había cambiado a Seibu Dome en 1998 y así fue conocido hasta que en 2005 decidió comenzar a vender los derechos de su nombre.

 

   El reconocido columnista del Diario Japan Times Wayne Graczyk, quien lamentablemente falleció en 2017, solía decir que el Seibu Dome perdió buena parte de su encanto cuando estrenó su techo, ya que a partir de ese momento perdió la hermosa vista de la naturaleza que lo rodea.

 

   Otra queja muy común del parque es su desequilibrada temperatura. Como no se trata de un domo completamente cerrado, como el Tokyo Dome, por ejemplo, no existe manera de controlar la temperatura dentro del mismo, razón por la cual el aire que se queda atrapado adentro suele exagerar la sensación térmica que existe a las afueras del mismo.

 

   Por ejemplo, si a las afueras del estadio hace calor, adentro hace más calor todavía porque el aire caliente se queda atrapado debajo del techo y no hay manera de sacarlo de ahí. Lo mismo ocurre cuando hace frío, ya que el aire frío se queda atrapado debajo del techo y convierte al estadio en un congelador.

 

   El venezolano Ernesto Mejía, que todavía juega para los Leones de Seibu, nos comentó una vez que durante el verano hace tanto calor dentro del estadio que el sudor lo obliga a cambiarse el uniforme 3 veces por juego para poder mantenerse fresco. Él lo compara con meterse a una piscina con el uniforme puesto y salirse de la misma chorreando agua.

 

El Seibu Dome siempre ha sido muy cómodo de visitar

 

   Independientemente de los problemas con su temperatura, el parque siempre ha sido muy vistoso y cómodo de visitar. Su pizarra electrónica es muy moderna, sus asientos, baños y puestos de comida son muy buenos y la atención que reciben los visitantes es de primera categoría.

 

   En la temporada 2005, vendió los derechos de su nombre y pasó a llamarse Invoice Dome, lo que dio inicio a una de las rachas más largas de cambios de nombre en la historia de la NPB. La idea, tal como ocurre en las ligas norteamericanas, es darle a una compañía privada la posibilidad de promocionar su marca a través del nombre de un estadio.

 

   Así, el parque pasó a llamarse Goodwill Dome en 2007, volvió a su nombre anterior Seibu Dome entre 2008 y 2014, luego lo cambió a Prince Dome en 2015 y finalmente al nombre con el que lo conocemos hoy, MetLife Dome, en 2018.

 

   Un fanático nos escribió en Twitter para manifestarnos su tristeza por la desaparición de las secciones abiertas de las gradas en las que los fanáticos podían sentarse en el piso, ya que, en su opinión, le daban personalidad al estadio.

 

   Estamos totalmente de acuerdo con su punto de vista. Una buena parte del encanto del Seibu Dome, de las cosas que lo hacían único, eran esas dos secciones en las que los fanáticos podían moverse libremente. El hecho de que ahora han sido reemplazadas por asientos sin duda va a disminuir ese encanto.

 

El club no ha aclarado si la instalación de las sillas reducirá la capacidad del estadio

 

   Algo que el conjunto no aclaró a la hora de anunciar que había completado la remodelación de esas dos secciones es si la misma va a afectar o no la capacidad de fanáticos, ya que el número de personas paradas que pueden entrar a las mismas debe ser mayor al número de asientos que ahora las ocupan.

 

   De cualquier forma, parece poco probable que la diferencia sea muy grande. Si la capacidad desciende por 300 o 400 personas, eso no afectará demasiado los totales de asistencia al estadio ni tampoco los ingresos de taquilla, ya que las entradas a esos espacios eran las más baratas de todas.

 

   Todo lo contrario, es posible que ahora los ingresos de taquilla aumenten debido a que los precios de esos asientos deben ser más caros en comparación a lo que se cobraba anteriormente.

 

   El cambio es la única cosa constante que existe en el universo, como dijo el filósofo griego Heráclito, y así como lo hemos presenciado ahora con el Seibu Dome, lo seguiremos presenciando en el futuro en el resto de los parques de la NPB.

 

   Algún día veremos desaparecer el Tokyo Dome, que seguramente será reemplazado por un parque más grande y más moderno en el futuro, y lo mismo ocurrirá con otros estadios del béisbol japonés que cada vez se hacen más viejos.

 

Nippon Ham está construyendo un nuevo estadio que será inaugurado en 2023

 

   Los Luchadores de Nippon Ham, por ejemplo, ya están construyendo un parque súper moderno que será su sede permanente a partir de la temporada 2023, mientras que también existe una propuesta para reemplazar el Estadio ZOZO Marine de Chiba por uno nuevo, si bien todavía no ha sido aprobada.

 

   Así, los Leones de Seibu se preparan a comenzar la temporada 2021 de la NPB con 2 secciones nuevas de asientos, en detrimento de las áreas abiertas que anteriormente permitían a los fanáticos sentarse sobre la grama artificial y ver los partidos de esa manera.

 

   La jornada inaugural 2021 del circuito japonés se disputará el viernes 26 de marzo en 6 parques distintos, incluyendo el MetLife Dome de Tokorozawa, donde los Leones de Seibu recibirán a los Búfalos de Orix.