Nishikawa no pudo conseguir un contrato con un equipo de la MLB
El jardinero estrella de los Luchadores de Nippon Ham Haruki Nishikawa no pudo concretar este fin de semana su sueño de jugar en las Grandes Ligas, luego de que venciera el plazo de 30 días que estipula el Sistema de Traspasos para asegurar un contrato a ese nivel.
No se trata de la primera vez que esto ocurre, ni tampoco será la última, si bien las razones por las que un jugador de la NPB no logra llegar a un acuerdo contractual con un conjunto de las mayores varían de un caso a otro, como explicaremos a continuación.
A la fecha de hoy, un total de 10 peloteros del circuito nipón han fracasado en su intento de mudarse a la MLB a través del Sistema de Traspasos. El primero de ellos fue, curiosamente, el dominicano Timoniel Pérez, quien comenzó su carrera profesional en Japón con los Carpas de Hiroshima.
Egresado de la academia de béisbol del conjunto japonés en la República Dominicana, el jardinero debutó en la NPB en 1996 y después de batear para .296 en 98 juegos en la temporada 1998 decidió apelar al Sistema de Traspasos a principios de 1999 para tratar de irse a las Grandes Ligas.
En su versión original, el sistema consistía de una subasta ciega en la que el club de la MLB que ofrecía más dinero ganaba los derechos de negociación con el jugador. Lamentablemente para él, ningún equipo presentó una oferta, por lo que tuvo que quedarse en Japón y jugar un año más con Hiroshima.
Hay que aclarar, sin embargo, que al año siguiente los Mets de Nueva York le compraron su contrato al club nipón y así fue que comenzó su carrera de 8 años en la Gran Carpa.
Otsuka fue el cerrador del Japón en el Clásico Mundial 2006
El segundo pelotero de la NPB en fallar en su intento de irse a la MLB a través del Sistema de Traspasos fue el lanzador Akinori Otsuka, mejor recordado por ser el cerrador de Japón en el primer Clásico Mundial de Béisbol en 2006.
Después de 6 exitosas campañas en ese rol con los Búfalos de Kintetsu (hoy Búfalos de Orix), el derecho hizo el intento de irse a las mayores sólo para sufrir la misma suerte de Pérez: ningún conjunto presentó ofertas por él.
La gran diferencia en su caso fue que en lugar de regresar a jugar con Kintetsu, firmó por 800 mil dólares anuales con los Dragones de Chunichi, conjunto con el que vio acción en 2003 y que, una vez finalizada la temporada, aceptó colocarlo de nuevo a disposición de los equipos de la Gran Carpa a través del Sistema de Traspasos.
Para su fortuna, en su segundo intento sí tuvo suerte y comenzó así una carrera de 4 años en la MLB que lo llevó a defender las camisetas de los Padres de San Diego y los Vigilantes de Texas.
El tercero fue otro lanzador, Yusaku Iriki, quien trabajó como relevista y abridor con los Gigantes de Yomiuri y los Luchadores de Nippon Ham antes de que este último aceptase anunciar su disponibilidad a los equipos de la Gran carpa a través del Sistema de Traspasos a finales de 2005.
Tal como en los dos primeros casos, ningún conjunto de las mayores presentó ofertas, pero para su fortuna Nippon Ham lo dejó en libertad poco después y eso le permitió conseguir un contrato con los Mets de Nueva York a principios de 2006.
El cuarto fue el lanzador de los Leones de Seibu Koji Mitsui, quien fracasó no en una, sino en dos ocasiones consecutivas. El club lo colocó a disponibilidad de los equipos de la MLB en diciembre de 2008 y luego en enero de 2009 y en ambos casos el plazo de 30 días se venció sin que éste recibiese ofertas.
Al final, no tuvo más remedio que regresar a jugar con Seibu, conjunto con el que terminó su carrera a finales de 2009. Su sueño de ver acción en las Grandes Ligas nunca se concretó.
El fallido intento de Iwakuma de irse a la MLB a través del Sistema de Traspasos fue controversial
El quinto intento fallido de utilizar el Sistema de Traspasos para tratar de dar el salto a las mayores ha sido el más controversial de todos hasta ahora y fue protagonizado por el derecho Hisashi Iwakuma, en ese entonces as de las Águilas de Rakuten.
En noviembre de 2010, los Atléticos de Oakland ganaron los derechos de negociación en la subasta ciega al realizar una oferta de 19,1 millones de dólares, pero fracasaron posteriormente en su intento de firmar al jugador luego de no poder llegar a un acuerdo contractual.
El conjunto californiano le ofreció al lanzador un contrato de 15,2 millones de dólares por 4 años y le dijo básicamente “tómalo o déjalo”, alegando que no iba a aumentar esa cifra porque ya tenía que pagarle otros 19,1 millones a Rakuten para dejarlo en libertad.
Esa postura molestó tanto al jugador como a su agente, el famoso Don Nomura, quien luego acusó a Oakland de hacer esa modesta oferta a propósito para impedir así que su representado firmase con uno de sus rivales divisionales (en su momento le dedicamos esta columna al tema).
Al final, Iwakuma decidió no aceptar la oferta y, luego de convertirse en agente libre al año siguiente, terminó firmando con los Marineros de Seattle, conjunto con el que tuvo una exitosa carrera de 6 temporadas y hasta lanzó un juego sin hits ni carreras.
El relevista japonés de las Estrellas de DeNA Hiroki Sanada se convirtió en noviembre de 2011 en el sexto jugador de la NPB en fallar en su intento de irse a las mayores a través del Sistema de Traspasos.
Luego de una carrera poco destacable de 10 años en la NPB, ningún conjunto de la Gran Carpa presentó una oferta para negociar con él, por lo que nunca pudo jugar a ese nivel.
El caso de Nakajima fue similar al de Iwakuma
También en noviembre de 2011, el compo corto estrella de los Leones de Seibu Hiroyuki Nakajima fue el séptimo pelotero en fracasar en su intento de irse a la MLB a través del Sistema de Traspasos y su caso fue bastante similar al de Hisashi Iwakuma.
Los Yanquis de Nueva York, sin esperarlo, ganaron los derechos para negociar con él luego de presentar una modesta oferta de 2,5 millones de dólares y cuando se dieron cuenta de lo que había ocurrido no supieron cómo salirse del problema.
Primero y principal, el equipo tenía en ese momento al infield más famoso de las mayores, que incluía a Alex Rodríguez, Derek Jeter y Robinson Canó, por lo que ni siquiera contaba con un cupo disponible para el japonés en su alineación.
Luego alegó que su intención era utilizarlo como suplente cuando alguna de esas estrellas se lesionase -cosa que parecía muy poco probable- y que, por lo tanto, sólo le podía ofrecer un contrato modesto.
Como era de esperarse, Nakajima lo rechazó y jugó un año más con Seibu, para luego declararse agente libre y firmar con los Atléticos de Oakland.
El estadounidense Tony Barnette es el octavo pelotero en nuestra lista de intentos fallidos, si bien en su caso ese resultado se veía venir.
Barnette quiso recompensar a su equipo en Japón, pero no lo logró
A finales de 2015, el relevista de las Golondrinas de Yakult ya había terminado su contrato con el equipo y, en calidad de agente libre, estaba negociando para tratar de regresar a la MLB. Sin embargo, como agradecimiento al club nipón, propuso utilizar el Sistema de Traspasos para que así éste recibiese algún tipo de compensación por dejarlo ir.
Esa estrategia, como era de esperarse, fracasó. Sabiendo que ya se había convertido en agente libre, ningún conjunto de las mayores iba a pagar voluntariamente por su traspaso cuando podía firmarlo sin tener que hacerlo y eso fue lo que ocurrió al final.
El noveno en la lista es el camarero estrella de los Carpas de Hiroshima Ryosuke Kikuchi, ganador de múltiples Guantes de Oro en la NPB, pero no un bateador de poder o de alto promedio, razón por la cual fue considerado por los equipos de la Gran Carpa en diciembre de 2019, pero no contratado.
Lo mismo ocurrió en esta ocasión con Haruki Nishikawa, un jardinero rápido con un alto porcentaje de embasado, pero carente de poder o de un alto promedio ofensivo. Si a eso le sumamos lo mal que está el mercado de las mayores actualmente debido al coronavirus, no debería extrañarnos que no haya recibido ofertas decentes y que haya decidido quedarse en Japón con Nippon Ham.