Resumen de la actuación latina en la NPB en 2014

   Como ya es costumbre y tradición, queremos dedicar nuestra última columna del año a hacer un resumen de la actuación de todos los jugadores latinoamericanos que vieron acción en la NPB en la temporada 2014.

 

   Un total de 31 peloteros de la región disputaron al menos un partido al máximo nivel de la liga nipona este año, lo que constituye un nuevo récord, y varios de ellos se alzaron con tanto premios individuales como de equipo.

 

   A continuación les presentamos un breve resumen de lo que hizo cada uno de ellos, empezando por los que, en nuestra opinión, tuvieron una mejor actuación y terminando con aquellos que, lamentablemente, no causaron una buena impresión o apenas recibieron oportunidades de jugar.

 

   A la hora de evaluar la actuación de cada jugador tomamos en cuenta sus números, los títulos que hayan ganado y su impacto tanto en la liga como en su equipo. Adicionalmente, pronosticamos su futuro en la liga basado en su rendimiento sobre el terreno.

 

   1. Ernesto Mejía. El venezolano de los Leones de Seibu fue sin duda el latino que más éxito tuvo en la NPB este año. A pesar de perderse los primeros 38 partidos del calendario (debutó el 15 de mayo luego de ser contratado como un refuerzo de emergencia), logró capturar el título de jonrones (34) de la Liga del Pacífico en una impresionante carrera que lo llevó a superar a otros dos rivales que estuvieron liderando la categoría durante casi todo el año. Por si eso fuera poco, lideró el circuito en porcentaje de slugging (.581), fue octavo en carreras empujadas (73) y décimo en promedio (.290). Si bien es cierto que también comandó la liga en ponches (156), eso no le restó ningún tipo de mérito a su impresionante actuación, que al final del año le valió su elección al Equipo Ideal de la temporada como el mejor primera base de la Liga del Pacífico. A pesar de que todavía le falta firmar su nuevo contrato con Seibu, ya llegó a un acuerdo con el equipo para regresar en 2015, por lo que todos sus fanáticos ya están a la espera de ver lo que podrá hacer en la liga el año que viene.

 

   2. Mauro Gómez. El dominicano de los Tigres de Hanshin también tuvo un debut para el recuerdo en la NPB. A pesar de llegar tarde a los entrenamientos primaverales y ver muy poca acción en la pretemporada, fue el cuarto bate titular del club en 143 de los 144 partidos de la campaña y una de las principales razones por las que el equipo pudo clasificar a su primera Serie de Japón en 9 años. Lideró la NPB en carreras empujadas con 109 y fue cuarto en jonrones (26), sexto en dobles (30) y séptimo en porcentaje de slugging (.492) en la Liga Central, además de registrar un buen promedio de .283. Por si esto fuera poco, implantó un nuevo récord de carreras empujadas (8) en una serie de postemporada en su circuito. Lamentablemente, no pudo guiar al equipo al título de la Serie de Japón, pero su gran actuación le valió su elección al Equipo Ideal de la temporada como el mejor inicialista de la Liga Central. La gerencia de Hanshin, tras quedar muy satisfecha con su rendimiento, le renovó su contrato por 2 años más y con un considerable aumento de sueldo a principios de este mes, por lo que lo seguiremos viendo jugar en la NPB al menos hasta 2016.

 

   3. Wily Mo Peña. El dominicano de los Búfalos de Orix registró este año la que ha sido su mejor temporada en la NPB y probablemente de su carrera. Fue segundo en carreras empujadas (90) y tercero en jonrones (32) en la Liga del Pacífico, luego de liderar ambas categorías durante la mayor parte de la campaña. Adicionalmente, fue tercero en bases alcanzadas (244), quinto en porcentaje de slugging (.486) y noveno en carreras anotadas (68) en su circuito. Su gran aporte como cuarto bate contribuyó en gran medida al éxito del equipo este año, que logró clasificar a la postemporada de la Liga del Pacífico por primera vez desde 2008. Su espectacular inicio de campaña, en el que conectó 10 jonrones y empujó 23 carreras, con un promedio de .292, le valió el premio al Jugador Más Valioso de su circuito en el mes de abril. Paradójicamente, todos estos éxitos parecen haberlo expulsado de alguna forma de la NPB. Orix decidió no renovarle su contrato luego de no poder llegar a un acuerdo con él. Según reportan los medios japoneses, el club sólo le ofrecía un año más, mientras que el jugador deseaba al menos dos, y también un salario mucho menor al que éste esperaba. Debido a su experiencia en la NPB, parecía un hecho que otro club de la liga lo contrataría de inmediato, pero hasta ahora nada ha ocurrido y a medida que pasa el tiempo esa posibilidad se hace cada vez más pequeña. Habrá que esperar para conocer cuál será su futuro en la liga.

 

   4. Héctor Luna. El dominicano de los Dragones de Chunichi completó otra exitosa temporada en la NPB, si bien volvió a perderse algunas semanas de acción debido a una lesión. No obstante, registró el quinto mejor promedio (.317) de la Liga Central y fue sexto en porcentaje de slugging (.501), noveno en carreras empujadas (73) y undécimo en jonrones (17) y anotadas (80). Estos números le valieron su elección al equipo ideal de la temporada como el mejor antesalista de la Liga Central. En 2015, cumplirá el último año de su actual contrato con el conjunto de Nagoya, pero de seguir rindiendo como lo ha hecho hasta ahora lo más probable es que lo renueven por varios años más.

 

   5. Rainel Rosario. El dominicano de los Carpas de Hiroshima fue una de las más gratas sorpresas de la NPB esta temporada. Contratado como una apuesta a futuro y sin cupos suficientes en el roster para ponerlo a jugar a diario apenas pudo ver acción en 69 partidos, pero el joven jardinero sacó el máximo provecho de las oportunidades que recibió. Bateó para .336 (el promedio más alto para un latino en 2014), conectó 14 jonrones, remolcó 49 carreras y registró un promedio de slugging de .584. Su rendimiento fue tan sobresaliente que incluso fue utilizado como cuarto bate cuando el titular de esa posición estuvo lesionado. Su temporada terminó en los mejores términos posibles al alzarse con el premio al Jugador Más Valioso de la Liga Central en septiembre. El club quedó tan satisfecho con su rendimiento que le triplicó su salario. En 2015, el caribeño cumplirá el segundo de los cuatro años que dura su actual contrato.

 

   6. Alfredo Despaigne. El cubano de los Marinos de Lotte, que fue contratado como un refuerzo de emergencia a mediados de julio, apenas jugó los dos últimos meses de la campaña, pero el impacto que causó en la liga fue extraordinario. En los 45 partidos en los que vio acción bateó para .311, con 12 jonrones, 33 empujadas y un increíble porcentaje de slugging de .627. Adicionalmente, causó un tremendo furor mediático con su llegada a la NPB debido a su fama internacional, por lo que su nombre saltó de inmediato a la fama en Japón. Tan satisfecha quedó la gerencia del equipo con su actuación que ya lo renovó por 2 años más y el triple del salario que ganó esta temporada.

 

   7. Yulieski Gourriel. El cubano de las Estrellas de DeNA, quien también fue contratado como un refuerzo de emergencia en mayo, causó un impacto similar al de su compatriota Despaigne en la NPB. No sólo sus números fueron muy buenos (bateó para .305, con 11 jonrones, 30 empujadas y un porcentaje de slugging de .536 en 62 juegos), sino que también causó un furor entre los medios locales con su llegada al país. La gerencia del club quedó tan satisfecha con su actuación que le ofreció triplicarle su salario por uno o dos años más, pero el jugador todavía no ha acordado renovar su contrato. El reciente cambio en las relaciones diplomáticas entre los Estados Unidos y Cuba podría permitirle irse a las Grandes Ligas en lugar de regresar a Japón, por lo que es probable que se tarde un poco en tomar una decisión acerca de su futuro.

 

   8. Guillermo Moscoso. El venezolano de las Estrellas de DeNA tuvo un gran debut en la NPB al imponer un nuevo récord de victorias (9) dentro de su equipo para un lanzador extranjero en su primer año en la liga. A pesar de que su récord final de 9-9 no fue el mejor, su efectividad de 3.39 fue la décima mejor de la Liga Central, lo que colocó su nombre entre los lanzadores más consistentes de la temporada 2014. Satisfecho con su actuación, el club decidió renovarle su contrato por 2 años más y un salario anual de 1,1 millones de dólares, lo que representa un aumento aproximado del 30 por ciento en comparación a lo que ganó en 2014.

 

   9. Luis Mendoza. El mexicano de los Luchadores de Nippon Ham tuvo un prometedor debut en la NPB al realizar nada menos que 26 aperturas para su equipo, más que cualquier otro abridor latino este año. Si bien su récord de 7-13 y su efectividad de 3.89 no fueron las mejores, sus 119 ponches y sus 162 entradas lanzadas hablan mucho de la confianza que su manager colocó sobre él a lo largo de la campaña. Su gran aporte sobre la lomita ayudó al equipo a clasificar a la postemporada del circuito por primera vez desde 2012 e incluso le ganó la apertura en el partido decisivo de la primera fase de la misma, en la que se fue sin decisión. El contrato que firmó el derecho originalmente con el club fue por 2 años, por lo que en 2015 volverá a defender los colores del club de Sapporo.

 

   10. Leslie Anderson. El cubano de los Gigantes de Yomiuri tuvo un debut espectacular este año en la NPB al batear para .444, con 3 jonrones y 9 carreras empujadas en los primeros 9 juegos de la temporada. Lamentablemente, un par de lesiones lo obligaron a perderse 2 meses de acción, pero sus números finales fueron excelentes: bateó para .319, con 15 jonrones y 50 empujadas en 87 juegos, razón por la cual el popular conjunto de Tokio desea renovarlo para 2015. Lo único que parece estar retrasando la renovación es que el jardinero tenía planeado hacerse una limpieza en su codo izquierdo durante el invierno y es probable que el equipo esté esperando a que se la haga o que se recupere de la misma antes de firmar el nuevo contrato.

 

   11. Tony Blanco. El dominicano de las Estrellas de DeNA, veterano ya de 6 campañas en la NPB, volvió a tener otro año mermado por las lesiones en su muslo. No obstante, cuando pudo ver acción arrojó los números a los que nos tiene acostumbrados: bateó para .283, con 17 jonrones, 60 empujadas y un porcentaje de slugging de .492 en 85 partidos. A pesar de haber ganado la doble corona ofensiva en 2013 y registrar buenos números este año, el club decidió no renovarle su contrato, pero el poderoso inicialista no tuvo que esperar mucho para conseguir trabajo de nuevo. Los Búfalos de Orix lo firmaron a principios de este mes por 2 años y 4,1 millones de dólares, lo que representa un aumento del 25 por ciento en comparación a lo que ganó con DeNA.

 

   12. José Celestino López. El venezolano de los Gigantes de Yomiuri registró este año números muy similares a los que obtuvo durante su debut en la NPB el año pasado. No obstante, su promedio descendió de manera alarmante (de .303 a .243), razón por la cual el club decidió dejarlo en libertad. Afortunadamente, las Estrellas de DeNA valoraron mucho sus 22 jonrones (sexto mejor total de la Liga Central) y sus 57 empujadas, además de su solidez defensiva, por lo que lo firmaron por 2 años y 1,26 millones de dólares anuales. El club planea utilizarlo como su primera base titular durante las próximas dos campañas.

 

   13. Luis Cruz. El mexicano de los Marinos de Lotte tuvo un buen debut en la NPB esta temporada, a pesar de que su promedio final fue muy modesto: .238. No obstante, fue tercero en la Liga del Pacífico en dobles con 32 y décimo segundo en jonrones con 16, además de liderar a su equipo en carreras empujadas con 61. Debido a esto, el club decidió extenderle su contrato por un año más y un salario aproximado de 716 mil dólares.

 

   14. Aarom Baldiris. El venezolano de las Estrellas de DeNA, fiel a la consistencia que lo ha convertido en el latino activo más longevo en la NPB, registró números decentes este año (.255 de promedio, con 17 jonrones, 29 dobles y 52 empujadas), si bien tuvo un bajón notorio con respecto a su excelente actuación del año pasado. El cambio de liga y de equipo al que se vio sometido, además de la falta de confianza que le mostró su nuevo manager, que le continuó cambiando su posición defensiva durante todo el año, sin duda afectaron su rendimiento. En 2015, cumplirá el segundo y último año de su actual contrato, que podría confirmarlo como el gran antesalista que es o terminar de convencerlo de cambiar de equipo una vez que se acabe el año.

 

   15. Juan Miranda. El cubano de los Luchadores de Nippon Ham debutó este año en la NPB con la difícil tarea de remplazar a su compatriota Michel Abreu, quien ganó el título de jonrones de la Liga del Pacífico el año pasado. A pesar de su muy modesto promedio de .227, el toletero logró ser titular de la primera base durante la mayor parte del año y totalizar 17 jonrones y 57 empujadas que sin duda contribuyeron a la clasificación del equipo a la postemporada. Lamentablemente, el conjunto no consideró que su esfuerzo haya sido tan bueno como para merecerle una renovación de su contrato, por lo que decidió dejarlo en libertad a principios de noviembre.

 

   16. Esteban Germán. El dominicano de los Búfalos de Orix completó otra exitosa campaña en la NPB, si bien sus números descendieron en casi todos los departamentos: bateó apenas para .250, con 7 jonrones, 28 dobles, 62 anotadas, 52 empujadas y 30 bases robadas. No obstante, su juego fue lo suficientemente consistente como mantenerse en la titularidad de la tercera base casi de manera ininterrumpida. En 2015 cumplirá el último año de su actual contrato con el club.

 

   17. Carlos Rosa. El dominicano de los Marinos de Lotte, a pesar de registrar un notorio bajón de forma a mediados de campaña, volvió a registrar buenos números como relevista intermedio con su equipo. Su efectividad de 3.02 en 45 apariciones no fue la misma de antaño, pero fue lo suficientemente buena como para ganarle una nueva extensión de su contrato para 2015, su quinta desde que llegó a Japón en 2011.

 

   18. Anderson Hernández. Al dominicano de los Dragones de Chunichi le costó trabajo adaptarse al estilo de los lanzadores japoneses, pero una vez que les cogió el truco logró producir números decentes. Al final, bateó para .262, con 5 jonrones y 32 empujadas en 86 partidos, en muchos de los cuales fue el campo corto titular del equipo. No se trata de números espectaculares, pero fueron suficientes para convencer a la gerencia del club de renovarle su contrato por un año más, por lo que regresará a la NPB en 2015.

 

   19. Enyelbert Soto. El venezolano de las Estrellas de DeNA completó otra campaña más en la que pasó más tiempo en la lista de lesionados o las ligas menores que en el roster activo. No obstante, cada vez que vio acción como relevista intermedio tuvo un éxito extraordinario: registró una efectividad de 1.57 en 26 apariciones. Lamentablemente, eso no fue suficiente para convencer al equipo de retenerlo, por lo que fue dejado en libertad tras finalizar la campaña. A estas alturas, no ha firmado un contrato con ningún otro equipo de la liga y parece difícil que lo pueda lograr debido a su largo historial de lesiones.

 

   20. Orlando Román. El puertorriqueño de las Golondrinas de Yakult tuvo un extraordinario inicio de campaña como relevista intermedio al registrar una inverosímil efectividad de 0.57 en 16 apariciones. No obstante, una lesión en su codo derecho lo obligó a abandonar los terrenos de juego a finales de mayo y a perderse el resto de la temporada. Afortunadamente, el club quedó muy satisfecho con su rendimiento y decidió extenderle su contrato por quinta vez, por lo que regresará a la NPB en 2015.

 

   21. Nelson Payano. El dominicano de los Dragones de Chunichi, tal como ocurrió durante su primer paso por la NPB en la campaña 2009, registró buenos números como relevista intermedio pero nunca pudo convencer a su equipo de darle mayores oportunidades de juego. Al final, dejó una excelente efectividad de 2.59 en 23 apariciones, pero fue dejado en libertad tras finalizada la temporada.

 

   22. Daniel Cabrera. El dominicano de los Dragones de Chunichi volvió a registrar 3 victorias en sus 3 primeras aperturas del año, pero a partir de entonces todo fue en picada y de una manera más dramática que la ocurrida el año pasado. Su récord de 5-7 y su efectividad de 4.09 en 14 aperturas, sumadas a sus constantes lesiones, al final convencieron a la gerencia del equipo de dejarlo en libertad y concentrar sus esfuerzos en la contratación de nuevos importados.

 

   23. Frederich Cepeda. El cubano de los Gigantes de Yomiuri debutó en la NPB en medio de una gran cobertura mediática, tal como lo hicieron sus compatriotas Despaigne y Gourriel. No obstante, y a diferencia de éstos, el veterano toletero decepcionó con su juego. Su promedio final fue un minúsculo .194, con 6 jonrones y 18 empujadas en 52 juegos, si bien es cierto que en la mayoría de ellos vio acción como bateador emergente. Sorprendentemente, el club lo tiene en sus planes para la temporada 2015, si bien todavía no le ha renovado su contrato.

 

   24. Rhiner Cruz. El dominicano de las Águilas de Rakuten, que fue contratado en junio como un refuerzo de emergencia, tuvo debut intrascendente en la NPB. Su récord de 2-2 y su efectividad de 3.99 en 29 apariciones representan números promedios, pero fueron suficientes para convencer a la gerencia de renovar el contrato del derecho por un año más, por lo que regresará a la NPB en 2015.

 

   25. Jorge Sosa. El dominicano de las Estrellas de DeNA, luego de registrar un par de extraordinarias temporadas en la NPB, decepcionó por primera vez sobre el montículo, ya haya sido por una lesión, por la pérdida de su forma o por su avanzada edad. Cualquiera que haya sido la causa, el veterano derecho no pudo registrar otra vez una efectividad inferior a 2.00 en más de 50 apariciones. Por el contrario, su efectividad fue de 4.94 en apenas 27 salidas, razón por la cual fue dejado en libertad tan pronto como finalizó la temporada. Sin duda es posible que firme con otro club de la NPB, pero debido a su edad y a la pobre forma que mostró este año parece difícil que otro conjunto se decida a apostar por él.

 

   26. Bárbaro Cañizares. El cubano de los Halcones de SoftBank llegó a la NPB precedido de su fama de gran bateador, pero sólo para encontrarse con que su club no tenía suficiente espacio para importados en su roster como para ponerlo a jugar a menudo. Por si eso fuera poco, todos sus compañeros de equipo batearon extraordinariamente bien este año, por lo que al final sólo pudo ver acción en 8 juegos, en los que registró un promedio de .308 con 2 carreras empujadas. A estas alturas, el club no ha anunciado todavía que lo haya dejado en libertad, pero tampoco ha renovado su contrato, por lo que en este momento se desconoce su futuro en la NPB.

 

   27. Abner Abreu. El dominicano de los Leones de Seibu fue contratado el año pasado como una apuesta a futuro y enviando al programa de desarrollo de jugadores del club. Sin embargo, en mayo de este año fue sorpresivamente promovido al conjunto mayor y en apenas su segundo juego logró deslumbrar a los fanáticos con una actuación para el recuerdo: se fue de 5-4, con un triple, 3 sencillos, una anotada y 3 empujadas. Lamentablemente, su estadía fue muy corta y apenas una semana después fue bajado de nuevo al equipo menor, donde pasó el resto de la temporada. Debido a su juventud, parecía posible que el club lo mantuviese en su nómina por un año más, pero al final la gerencia tomó la decisión de dejarlo en libertad.

 

   28. Yuniesky Betancourt. El cubano de los Búfalos de Orix, quien llegó a Japón tras disputar 9 temporadas en las Grandes Ligas, fue una de las mayores decepciones latinas de esta campaña. Apenas pudo sumar un imparable en sus 6 primeros juegos y en total sólo pudo disputar 18 en toda la temporada, en lo que dejó un muy pobre promedio de .141 y 4 carreras empujadas. Tal fue el fracaso de su adaptación al estilo de juego de la liga que el club lo dejó en libertad a finales de julio, ni si quiera esperó hasta que terminase la campaña.

 

   29. Michel Abreu. El cubano de los Luchadores de Nippon Ham, luego de capturar el título de jonrones de la Liga del Pacífico durante su debut en la NPB el año pasado, apenas pudo ver acción en 6 juegos este año debido a una lesión que al final obligó al equipo a dejarlo en libertad. Logró conectar un jonrón solitario en esos 6 partidos, pero eso no fue suficiente para convencer al club de retenerlo. Se desconoce si ya se recuperó de la lesión que lo estaba afectando y si algún equipo japonés está interesado en firmarlo para 2015.

 

   30. Alexis Gómez. El dominicano de los Dragones de Chunichi, a pesar de completar una buena pretemporada, se quedó esperando durante todo el año por una oportunidad para demostrar su talento. Al final, sólo pudo ver acción en 12 juegos y siempre como bateador emergente, por lo que su promedio final fue un minúsculo .077. El club decidió dejarlo en libertad a principios de septiembre.

 

   31. Edison Barrios. El venezolano de los Halcones de SoftBank, ya en su segunda campaña con el club, sufrió la misma suerte del cubano Bárbaro Cañizares: vio sus oportunidades de jugar reducidas prácticamente a cero debido a la escasez de cupos para importados en el roster del equipo. Al final, sólo vio acción en 2 partidos como relevista intermedio, en los que dejó una efectividad de 3.38. La gerencia decidió dejarlo en libertad poco después de finalizada la temporada.